Moralzarzal en Común (MeC) denuncia la política comunicativa de VMP, a la que califica de tendenciosa, falta de pluralidad y continuista de la ejercida por el PP durante más de una década.
Durante más de una década los distintos gobiernos del PP en Moralzarzal utilizaron la revista municipal como un medio de propaganda exclusivo de sus equipos de gobierno.
En 2015, tras los acuerdos de gobierno alcanzados entre VMP y MeC, esa dinámica cambió y la revista municipal dio cabida a las opiniones de los grupos políticos con representación en el consistorio. Eso fue así hasta que MeC salió del gobierno municipal por el incumplimiento, por parte de VMP, de los acuerdos de gobierno, entre ellos el de tener al frente de la comunicación institucional a un cargo de confianza en vez de a un empleado público. Esa circunstancia fue aprovechada por VMP para volver a prohibir que los grupos políticos pudieran expresar sus opiniones en el medio de comunicación que pagan todos los ciudadanos de Moralzarzal. Con ello VMP incumplió hasta su propio programa electoral.
A los pocos días de haber comenzado esta legislatura desde MeC constatan los siguientes hechos:
- El responsable de la comunicación municipal sigue siendo un cargo de confianza de VMP!, que cobra del erario público para dar voz solo a VMP. Esto lo califican de no ser ético, dado que sesga por completo la información que llega a la ciudadanía solo en favor del gobierno municipal, y no se hace eco de las declaraciones u opiniones del resto de concejales electos. Exactamente igual que hacía el PP.
- Los distintos medios de comunicación institucional (Facebook, Twitter, etc.) se utilizan para difundir solamente lo que dicen los concejales del equipo de gobierno ante los medios de comunicación privados, el resto de opiniones se silencian desde el propio Ayuntamiento.
Moralzarzal en Común y las organizaciones que lo conforman (IU y Podemos) dicen que:
- Quieren unos medios de comunicación municipales que se rijan por la veracidad, la responsabilidad, la pluralidad y el funcionamiento democrático.
- Para ello quieren que los responsables de comunicación sean empleados públicos, no cargos de confianza, para conseguir así una política de comunicación independiente, veraz y plural.